Minimalismo cálido: la guía definitiva de Viccarbe

¿Qué es el minimalismo cálido?

El minimalismo cálido conjuga la estética minimalista con la calidez de los materiales naturales. La máxima de “menos es más” entendida la reducción a lo esencial y la belleza de la simplicidad. Un refugio armónico que elimina lo superfluo para dar peso a aquellos elementos decorativos y arquitectónicos que hablan por sí mismos.

Espacios creados para el confort y la funcionalidad. En ellos, la calidez de los materiales, la mezcla de texturas, la suavidad cromática, la iluminación tenue, la artesanía y la naturaleza irradian equilibro y serenidad. Una tendencia perfecta para vestir todo tipo de espacios y proyectos. Del retail al contract, hospitality o residencial. En todos ellos, la necesidad de calma y bienestar es imperante.

Las claves del minimalismo cálido

Para comenzar, debemos crear espacios pulcros y diáfanos. Sin artificios, sobrecargas ni distracciones visuales. Donde queda a la vista únicamente lo imprescindible. Además, el orden mantendrá una atmósfera en armonía. De esta forma, el minimalismo cálido desprende lo mejor del diseño nórdico, la estética japonesa y el estilo mediterráneo.

Tonos naturales y texturas suaves
Sin duda, el minimalismo cálido se diferencia por una paleta cromática muy natural. Los tonos blancos cálidos, los grises suaves y la madera natural crean la base ideal para esta estética. Además, las texturas suaves y los materiales naturales como la madera, el lino o la lana dotan de esa sensación de calidez y confort. Elementos fundamentales para crear espacios duraderos y resistentes a las modas y al paso del tiempo.

Calidad y funcionalidad en los materiales

Invertir en materiales de calidad ayudará a convertir los espacios en lugares únicos y funcionales. La madera natural o el microcemento se presentan como las grandes opciones para los pavimentos. Por su parte, en las paredes se busca textura y a la vez suavidad. La piedra, el mármol o materiales de acabado imperfecto y manual como el cemento, la cal, la arena o la arcilla son perfectos para este tipo de interiorismos.

Iluminación tenue y natural

La iluminación juega un papel importante en el minimalismo cálido. Un proyecto lumínico que huya de las luces frías y brillantes para optar por las suaves y cálidas. Por ejemplo, las luces indirectas y las lámparas de mesa aportarán una sensación de lo más acogedora al espacio. Además, esta estética pide luz natural a raudales. Por ello, las cortinas que se elijan deben ser de tejidos ligeros que permitan regar de luz todos los rincones.

Ergonomía en el mobiliario

El minimalismo cálido busca la funcionalidad y el uso práctico de todos los elementos que componen el espacio. Y por supuesto que las piezas de mobiliario no pueden ser menos. Muebles de formas sencillas, diseñados para ser cómodos y prácticos. De diseño simple, líneas puras y materiales nobles y naturales. En este sentido, el arquitecto John Pawson lo demuestra con maestría. En sus colecciones Trestle y Foro para Viccarbe, prescinde de ornamentos para crear piezas proporcionadas que se adaptan con flexibilidad al tiempo y al espacio.